Salvemos el Salvador, o la lucha transversal por la cultura.
Confieso que yo no soy creyente, tampoco soy una persona conservadora. Pero, sí que creo en la cultura, Salvemos el Salvador. Creo en su poder para cambiarnos y para cambiar todo lo que nos rodea.
Resulta que el patrimonio cultural de nuestra ciudad se cae. Aunque gran parte de él ya se ha caído o decaído en gran medida. Por eso, y por lo revolucionaria que me resulta la lucha transversal, he decidido apoyar esta causa.
Quizá entre todos podamos dejar a un lado las ideologías. Quizá, podamos además de reparar las grietas, crear un método de lucha en común. Es decir, que esta sea la primera de muchas luchas comunes por la cultura en la ciudad. Hoy por El Salvador, mañana por los creadores locales, por el deporte o por cualquier colectivo con necesidades urgentes.
Como vecina y como madre, prefiero que mis hijos vean el retablo de Churriguera en la Iglesia del Salvador que no en un pasillo de un centro comercial. Me gustaría que el órgano barroco, considerado uno de los tres mejores de la Comunidad de Madrid, no se perdiera. Y a mí, me parece bien que los creyentes tengan donde ejercer su culto.
Veo mucha generosidad en los firmantes del manifiesto. Espero que de aquí salga un cambio a nivel humano. Espero que las luchas de todos y cada uno de nosotros se vean apoyadas transversalmente por inesperados simpatizantes. Aunque no compartamos la totalidad de las ideas del otro, podemos entender que por encima de todo hay valores como la cultura, la libertad o el modelo de ciudad que queremos. Eso, más allá de Salvar el Salvador es salvarnos a nosotros mismos. Es salvar nuestra ciudad.
Firma en change.org para salvar el Salvador.