Dámanso Fernández. Maestro de Magos en Leganés.
Dámanso Fernández. En Leganés hay cosas que te pueden pasar por increíbles que parezcan. Verás. Si después de recibir en casa un paquete, ves una estela mágica en el rellano, creéme es totalmente normal. Incluso, puede pasar que un día al abrir tu buzón para recoger la correspondencia encuentres un naipe al azar. Te digo que es normal porque Dámaso Fernández , además de un gran maestro de magos, es cartero en Leganés. Dámaso tiene una carrera contrastada como mago, es reconocido dentro y fuera de España.
Los magos más jóvenes se le rifan y el mismísimo David Coperfield fue a ver a Dámaso actuar en la archiconocida sala Houdini de Madrid. David le felicitó como también lo hacen sus discípulos italianos de la Universidad de la Magia Internacional Dámaso Fernández de Italia. Allí, viaja tres veces al año para participar en conferencias, eventos y galas en los que siempre encuentra el reconocimiento tanto del público como el de sus colegas magos. Además, cada año se entrega un premio con su nombre. A Dámaso le reconocen porque a pesar de ser autodidacta en el mundo de la magia siempre ha sido un innovador. Diseña sus propios juegos, como la varita viajera y la carta equilibrista. Muchos de los métodos que usa son innovadores en la magia con cartas.
Hoy el maestro de magos premiado doblemente con el Premio Ascanio a la aportación al mundo de la magia sigue viviendo en San Nicasio. Los expertos reconocen la calidad de su exquisita cartomagia mientras que él vive una vida de lo más tranquila en Leganés. Ciudad a la que quiere y de la que la apasiona su gente. Ciudad en la que disfruta de sus zonas verdes.
Dámaso actúa con frecuencia en La Cuchara Mágica de Leganés Norte, así como en otras salas de Madrid. Es humilde y elegante. Ha compartido escenario con Pepe Carrol y Tamariz. Al igual que ha llevado la magia de manera altruista al Severo Ochoa y cada año por Navidad organiza una gala benéfica. Es un referente para jóvenes magos como Jorge Blass. Y es un referente para mi de la elegancia de la sencillez. De cómo una vida, aparentemente sencilla como la de un cartero, puede ocultar tanta magia.